«Al interior de la naturaleza
—¡dice la mente burguesa!—
nunca entra ningún espíritu creado.»
No, ni a mí ni a mis hermanos
recordéis estas palabras,
os lo pido por favor.
En cada lugar, pensamos,
estamos en lo interior.
«¡Venturoso aquel a quien
muestra la cáscara externa!»
Frase que oigo repetida
ya desde hace sesenta años.
La maldigo, a escondidas.
Me digo miles de veces:
todo lo da en abundancia,
lo da también con agrado.
Natura no tiene cáscara,
natura no tiene hueso,
todo es ella al mismo tiempo.
A ti mismo examínate primero:
¿tú qué eres? ¿Eres cáscara o hueso?